Desde hace unos años, un nuevo sistema de piscina ha hecho su aparición en el mundo de la piscina privada y piscina publica. Se trata de las piscinas de arena compuestas de cuarzo.
Las piscinas en forma de playa representan un concepto de piscina personalizada, mucho mas variadas que las piscinas de chapa tradicionales. Se entra en el agua suavemente disfrutando de las mismas sensaciones que en una playa. Podemos sentarnos, tumbarnos, jugar y disfrutar de los placeres del agua en toda seguridad
Las piscinas de arena son un nuevo concepto de vanguardia y diseño ideal para espacios abiertos y naturales, estas piscinas tipo playa se mimetizan a la perfección con el entorno y se adaptan a las necesidades del terreno.
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Las piscinas de arena son piscinas que se caracterizan por un acabado tipo playa. Es decir, son piscinas de arena compactada o en las que se utilizan resinas y otros materiales para conseguir un acabado estético similar al de una playa natural.
Por otra parte, este tipo de piscinas suelen tener una forma irregular, procurando crear esa sensación de entorno natural. Y pueden tener distintos tamaños, para adaptarse al espacio disponible. Para construir una piscina de arena se puede utilizar hormigón, como en los vasos de las piscinas de obra convencionales, y revestirlo de resina y arena.
Podremos optar por la forma y medida de la piscina que mas nos guste en armonía con el terreno como si fuera una laguna privada, así como el de las playas alrededor de esta, también definir las medidas, la profundidad, el grado de inclinación de la bajada, el color del agua y de las playas. Si duda se trata de una piscina a medida adornada opcionalmente con una paisajística tropical como; césped, rocas, puente, trampolín, cascadas, ambiente iluminado, haciéndolo todo posible.
Las piscinas de arena suelen tener precios algo más elevados que la clásica piscina de hormigón. Suelen requerir un mayor tiempo de ejecución y los materiales suelen ser más costosos. Una piscina de arena puede costar entre 10.000€ y más de 25.000€, aunque el precio medio más habitual suele estar en torno a 20.000€.
Hay que tener en cuenta que, como cualquier otra piscina, las piscinas revestidas de arena deben disponer de un sistema de depuración del agua (que suele llevarse a cabo mediante la cloración tradicional o la cloración salina). Por otro lado, suelen acompañarse de un proyecto de paisajismo para integrarlas perfectamente en el jardín o espacio en el que se instalan.
Los factores que más suelen influir en el precio de construcción de una piscina de arena son el tamaño de la piscina, los materiales utilizados, los complementos que se incluyan y el tipo de terreno.
El tamaño de la piscina influirá directamente en la cantidad de materiales que haya que utilizar, así como en el tiempo que deberán invertir los profesionales para construir las instalaciones.
Los materiales pueden ser de distinto tipo (arenas artificiales, resinas, etc.) y también pueden tener calidades diferentes, lo que influye en el coste de los mismos.
Por supuesto, habrá que incluir diversos complementos. En este apartado se pueden incluir desde adornos estéticos (rocas, vegetación, cascadas, etc.) hasta equipos relacionados con el sistema de cloración, el mantenimiento de la piscina o incluso la climatización de las instalaciones.
Y el tipo de terreno influirá en la dificultad de construcción de la piscina de arena, ya que en función de su dureza y otras cuestiones puede resultar más costoso preparar el espacio disponible.
Las piscinas de arena tienen multitud de opciones de decoración, según el aspecto y ambiente que quieras transmitir
En el interior de las piscinas se les puede incluir una serie de luces LED para que, una vez programadas, cuando sea de noche estas se enciendan y le den un aspecto más romántico al lugar. Además, esto te permitirá ver mejor si te quieres bañar cuando ya no hay luz solar.
Si lo que quieres es darle un aspecto más playero, como si estuvieses en Hawaii, solo tienes que comprar rocas artificiales y añadir plantas como palmeras o hamacas en su alrededor.
Si quieres estar en un ambiente más relajado y tener una zona para tus amigos justo al lado de la piscina, opta por una carpa estilo chill out; solo tendrás que incorporar cojines y asientos cómodos, así como una cortina para el sol.
Este tipo de piscinas te hace sentir que estás en una cueva ya que además de la arena, se incorporan unas rocas donde cae agua en forma de cascada.
Este tipo de piscinas es una de las más demandadas gracias a su estética y su simulación mayor a playa. Esta claro que la podremos ver en muchos hogares.
El mantenimiento de estas piscinas es bastante sencillo y no dista mucho de una piscina tradicional, aunque su arena compactada facilita la limpieza. Necesitas:
El mantenimiento es el mismo que el de una tradicional, con mayores ventajas si se realiza de forma correcta, ya que al ser arena de cuarzo natural el agua está más caliente y se puede alargar la época de baño.
